3 problemas típicos en el aprendizaje del alemán

El alemán es una lengua que al principio pueda resultar muy complicada si empiezas a estudiar alemán desde cero. Es típico que algunas personas arranquen con mucha ilusión, soñando con emigrar algún día a Alemania, y luego en el primer o segundo curso se echan para atrás, en cuanto la cosa se pone más complicada. Sin embargo, no hay que desanimarse pensando que no se nos da bien aprender idiomas. El alemán es una lengua que nos va a costar y que requiere varias horas de estudio, así que no hay por qué tener prisa.

En este artículo quiero destacar tres problemas del aprendizaje del alemán que me he encontrado hablando con algunos estudiantes de esta lengua y contra los que debes estar prevenido. Con todo, para mí es una lengua cuya fonética me sigue sonando muy bien y donde resulta muy atractiva la variedad de matices.

1. No saber buscar en el diccionario de alemán

En el tema de los diccionarios de alemán nos encontraremos que no viene la palabra que buscamos. Adivina lo que pasa. Está declinada y no aparece como tal; tienes que buscar su forma base, eliminando las desinencias. Por ejemplo, para saber lo que significa Taschenabteilung, no puedes buscarlo sin más en un diccionario normal porque no aparece. Debes separar la palabra compuesta y separarla de su desinencia -en. Buscaríamos "Tasche" y "Abteilung", que significan "bolso" y "sección" respectivamente. La sección de bolsos.

Entiendo que puede resultar un poco complicado, pero con el tiempo se aprende a reconocerlas. Y cuando tengas dudas de si una palabra es o no compuesta, prueba a buscar la primera parte y la segunda por Internet en algún traductor para irte acostumbrando. Verás que resulta más sencillo.

2. No entender el vocabulario técnico en alemán

Esta es la parte que todo el mundo solemos llevar peor y, realmente, no se avanza mucho hasta que no se ha ido a aprender alemán en Alemania, que es donde puede poner imagen a las cosas e interrelacionarse con personas nativas. Se puede ir aprendiendo palabras por bloques temáticos y memorizarlas, pero realmente esta técnica no empieza a rendir sus frutos hasta que no integramos esas palabras sueltas en frases.

Como sistema de aprendizaje, es primordial conocer lo básico: vocabulario de la familia, de la casa, de los animales, los números, el trabajo, la comida, los deportes... Lo que hablaremos con todo el mundo, vaya. Cuando entramos en el terreno de lo técnico, si alguien ha estudiado en alguna universidad alemana, verá que requiere más esfuerzo y estudio: "el alemán de la economía", "el alemán de la informática", "el alemán de la medicina"... Si nos acercamos a un texto, es importante entender que por conocer el vocabulario básico no vamos a poder comprender necesariamente el lenguaje técnico.

Lo más recomendable es tener paciencia y empezar por el vocabulario básico y textos facilitados. A veces, los periódicos pueden llegar a ser extremadamente complicados si tienes un nivel bajo. Cuando sepas hablar un poco de alemán, ya podrás enzarzarte en el lenguaje técnico de tu profesión. Empieza por aprender listas de vocabulario, pero sobre todo, trata de ponerlo en práctica a través de una inmersión lingüística.

3. Adquirir malos hábitos en la pronunciación

La fonética es fundamental para que los alemanes te entiendan. Quizás hayas aprendido ya que la ü con diéresis se pronuncia como la u francesa. Sin embargo, cuando intentas hablar alemán, es fácil que si no recuerdas cómo se escribe la palabra puedas decirla sin diéresis, o poner diéresis cuando no toca. Es cuestión de práctica y de que escuches mucho alemán para acostumbrarte poco a poco.

Además de aprender la pronunciación de las vocales, luego está también la cuestión de la entonación. Aunque leas un texto pronunciando de forma perfecta, para que suene auténtico alemán tienes que darle la misma entonación que suelen darle ellos, lo que los alemanes llaman la "satzmelodie" o melodía de la oración. Generalmente, las afirmaciones y preguntas con pronombre interrogativo se hacen siguiendo un modelo de arriba abajo. Ejemplo: Ich komme aus Spanien. Y las preguntas sin pronombre interrogativo, de abajo arriba: Kommst du aus Spanien?  
 
¿Qué cosas te resultan más difíciles del alemán? ¿Has empezado ya a estudiar esta lengua?